Francisco, mejor conocido como Frankie por sus amigos, había sido residente de Avondale desde que tenía memoria. La vida había sido buena hasta que surgieron problemas de salud y perdió su trabajo. Sin ingresos estables para pagar el alquiler, se vio obligado a vivir detrás de una iglesia del vecindario y usar su bicicleta para desplazarse. Durante trece meses, luchó por orientarse, viviendo una vida sencilla y modesta.

A pesar de sus problemas de aprendizaje, Frankie es un hombre de buen corazón, siempre dispuesto a echar una mano. Sin embargo, el destino tenía otros planes. Un día, tuvo un terrible accidente mientras montaba en bicicleta, lo que lo llevó a la Clínica Familiar Parsons de Circle the City. Fue tratado con la mayor compasión y ofreció sugerencias para salir de su situación actual. El pudo conseguir una cama en CASS temporalmente. Con el tiempo, el regresó al vecindario donde se sintió cómodo y seguro.

Desafortunadamente, su lesión en la pierna empeoró y necesitó hospitalización. Con la ayuda de un navegador hospitalario de Circle the City, Francisco fue admitido en el Centro de Relevo Downtown, donde recibió la atención médica y el apoyo necesario. Fue un punto de cambio para él y comenzó el proceso de encontrar una vivienda permanente.

Han pasado tres meses desde que Frankie ingresó al Centro de Relevo y las cosas finalmente están mejorando para él. Se siente cada día más esperanzado y ansioso por comenzar su nueva vida.

El viaje de Frankie hacia la curación es un testimonio del trabajo transformador de Circle the City. Es gracias al apoyo de nuestra comunidad que podemos ayudar a hombres, mujeres y niños que se encuentran sin hogar. Únase a nosotros para celebrar la resiliencia y la esperanza de Frankie y las innumerables personas que han encontrado sanación y esperanza en Circle the City.