Deborah, o Deb como la conocen, siempre ha sido una cuidadora. Nativa americana de Phoenix de quinta generación, pasó años trabajando como asistente médica, ayudando a los demás. Pero después de que un devastador accidente de coche la dejara herida e incapacitada para trabajar, Deb se vio de repente necesitada de cuidados.

Durante estos momentos difíciles, Deb se enteró de la existencia de Circle the City, un lugar que ofrecía algo más que atención médica. Era un salvavidas. Llegó al Centro de Respiro Médico del Centro justo una semana antes de una operación crucial en marzo. Por primera vez en meses, se sintió segura y encontró una comunidad que quería ayudarla a centrarse en la recuperación.

En el Centro de Respiro Médico, Deb encontró algo más que cuidados físicos. Redescubrió sus pasiones creativas. Su amor por la música la llevó a unirse al coro, y volvió a conectar con su pasión por el arte. Las hermosas obras que crea ahora alegran la vida de quienes la rodean.

Gracias a Circle the City, Deb está dando pasos hacia una vida asistida y un futuro estable.

Su camino no ha sido fácil, pero ya no lo afronta sola.